Si miramos a nuestro alrededor, vemos ángulos por todas partes. En las porciones de las pizzas, en las puntas de los cuchillos o en las esquinas de la pantalla de tu ordenador aparecen ángulos -las matemáticas están por todas partes-.
Un ángulo es la parte del plano comprendida entre dos semirrectas que tienen el mismo punto de origen o vértice. Así, los ángulos pueden variar desde el ángulo 0 grados -el menos amplio posible- hasta 360 grados -el más amplio posible-. Los ángulos se miden en
grados sexagesimales, en
radianes o en
grados centesimales.
De pequeños, según su amplitud, nos enseñaron cinco tipos de ángulos: ángulo nulo (0º), ángulo agudo (entre 0º y 90º), ángulo recto (90º), ángulo obtuso (entre 90º y 180º) y ángulo llano (180º), pero hay dos tipos más; el ángulo oblicuo (entre 180º y 360º) y el ángulo completo o perigonal (360º).
Ahora vamos a aprender algo nuevo, vamos a aprender qué es el arco capaz. El
arco capaz es el trozo de circunferencia desde el que conseguimos obtener siempre el mismo ángulo. Así, si dibujamos un trozo de circunferencia y formamos un triángulo, cuyos vértices son los extremos de ese trozo de circunferencia y un punto cualquiera de ese trozo de circunferencia, el ángulo que se forma en ese punto es siempre el mismo. Un ejemplo es el arco capaz de 90º, para el que tenemos que utilizar una semicircunferencia.
Mueve los puntos A, B o C para comprobar que el ángulo de 90º (en C) no varía.
Siempre forma en C un ángulo recto. Es curioso, ¿verdad?
Tarea 1 de abril: Enviar un único email que contenga:
a)Tres fotografías realizadas sobre un reloj de manecillas; una con un ángulo agudo, una con uno recto y otra con uno llano.
b)Describir e ilustrar con su gráfica correspondiente al menos cuatro formas de realizar ángulos rectos.